10 años sin Radioactivo 98.5
La vida en sí es un cambio constante, queremos creer que las cosas siguen el mismo camino que tomaron alguna vez, pero cuando ha pasado una década completa no podemos negar que las cosas siempre se desvían del curso original.
La gente joven que lea esto tal vez no tenga idea de lo que para mi generación significó Radioactivo 98.5, era el concepto radiofónico por excelencia para la Ciudad de México, gente como Ricardo Zamora, Olallo Rubio, Ileana Rodríguez, Julio Martinez, Erich Martino, Ilana Sod, Fernanda Tapia, Jordi Soler, etc. Fueron las voces que marcaron a muchos jóvenes como yo.
El proyecto era autentico, era real y se basaba en el rock, no solamente como un concepto musical, si no como una actitud ante la vida; sin tapujos realizaban experimentos comunicacionales bastante interesantes como los juguetes radioactivos y radio sexo. Muchísimos programas como “Byte” “Data” “Volumen” demostraron que se podía tener contenido de calidad en la radio comercial.
Como era de esperarse un 2 de abril del año 2004, grupo imagen dueño de radioactivo cerraría la estación para cambiar el concepto de la frecuencia, ahora se transformaría en radio hablada (radio de noticias para apoyar las candidaturas presidenciales de 2006). Aquel día fue conocido como el viernes negro, la radio jamás volvió a sonar igual desde entonces…
Lo más importante al recordar esta fecha, es el preguntarnos ¿en qué momento perdimos el camino?
¿Por qué dejamos que los monopolios decidieran lo que vemos, lo que nos gusta y peor aun lo que pensamos?
¿Por qué dejamos que la comunicación se transformara en información burda en redes sociales, en noticias escandalosas que no reflejan la realidad; en medios que solo quieren ayudar a alguien a llegar al poder?
¿Por qué vivimos en una sociedad que no nos merecemos impuesta por políticos que no necesitamos?
¿Por qué si teníamos una estación de radio que expresaba lo que sentíamos, dejamos que muriera junto con la música que amábamos?
Ya han pasado 10 años desde que escuchamos esas voces y esa música, nada ha llenado el espacio radiofónico que dejo aquella estación, los habidos consumidores de la radio nos hemos alejado de ella, porque sin lugar a dudas la radio cambió en el momento en el que una corporación decidió que la música no importaba más.
Hoy la vida nos demuestra que el cambio es constante, hace una década cambió la radio en México; tal vez ese cambio constante en algún momento nos haga encontrar el camino de vuelta.